Este Martes Santo, la comunidad educativa de la presencia salesiana en Talca continuó su preparación espiritual para vivir intensamente la pasión, muerte y resurrección de Jesús durante Semana Santa. Fue una jornada marcada por la introspección y el llamado a revisar nuestras decisiones cotidianas a la luz del Evangelio, representar este itinerario con la tierra, la luz y la cruz.
Durante la oración de buenos días, el padre David Albornoz, director de la Presencia Salesiana en Talca, invitó a todos los presentes a reflexionar sobre sus acciones y actitudes en el día a día. "Muchas veces las experiencias no son fáciles, y los aprendizajes tampoco. Cuando algo nos cuesta, como una disciplina artística o deportiva, solemos dejarlo. Esa es una tentación constante: dejar las cosas a medias", señaló.
El padre Albornoz planteó la disyuntiva que también vivió Jesús: “¿Cómo voy a llevar adelante mi misión? ¿Me centraré solo en mí, o pondré al servicio de los demás el mensaje del Evangelio?”. En este sentido, animó a los presentes a no rendirse ante las dificultades y a elegir siempre el camino que, aunque más exigente, nos permite desarrollarnos plenamente.
Este Martes Santo es una oportunidad para encender nuevamente la llama del compromiso personal y comunitario, y seguir caminando con Jesús hacia la Pascua.