En el Centro Educativo Salesianos, la educación no solo se limita al aula, sino que también se extiende hacia la formación de valores esenciales como la responsabilidad ambiental y la solidaridad. En este marco, la Brigada Ecológica se ha consolidado como una iniciativa ejemplar, centrada en promover el reciclaje y la protección del medio ambiente dentro de la comunidad educativa.

Formada por estudiantes de 1° a 6° básicos, la Brigada Ecológica está comprometida con el cuidado del entorno y dedica parte de su tiempo semanal a fomentar hábitos responsables en toda la comunidad escolar. Su misión principal es implementar acciones concretas para promover el reciclaje, reduciendo así el impacto ambiental de la institución.

Una de las labores más destacadas de la brigada es la recolección y clasificación de materiales reciclables, como papel, cartón y plástico. Estos desechos son cuidadosamente depositados en puntos de reciclaje estratégicamente ubicados en todo el colegio. Además, los estudiantes de la brigada se encargan de supervisar el uso de las eco-cajas, instaladas en cada sala de clases, para asegurar que los residuos reciclables sean recolectados de manera ordenada y eficiente.

La profesora Carla Farías, encargada del Comité de Medio Ambiente Sede Norte, señaló que la Brigada Ecológica también realiza campañas informativas dirigidas a sus compañeros de clases, donde educan sobre la importancia del reciclaje y brindan consejos prácticos para reducir la generación de desechos en el día a día. “De esta manera, los brigadistas no solo actúan como recolectores, sino también como agentes de cambio que promueven una cultura de cuidado y respeto por el medioambiente dentro del colegio”, añadió.

“Gracias al esfuerzo y dedicación de la brigada, el CEST logra reducir significativamente los residuos no reciclables generados en el colegio, contribuyendo de manera activa a la protección del entorno”, puntualizó la docente.  Sin embargo, aún queda trabajo por hacer para fortalecer una cultura ambiental entre los estudiantes y continuar avanzando hacia un colegio cada vez más sostenible.

Esta labor también ha permitido establecer alianzas con centros de acopio externos, como la Municipalidad de Talca, garantizando que los materiales reciclables recolectados sean gestionados adecuadamente.

El compromiso de la Brigada Ecológica es un ejemplo claro de cómo la educación y la acción colectiva pueden generar un impacto positivo en la comunidad y en el medioambiente, cultivando una generación más consciente y responsable con el planeta.